Querido diario: me viene la regla y se me fríe la neurona.
Las mujeres solemos tener la regla. Hay quien tiene más o menos síntomas antes que “avisan” (o no) de que va a venir: que si dolor de pechamenes, que si estar hinchada, que si mal humor…
Pues yo se cuando me va a venir la mía porque me vuelvo un ente que nada tiene que ver conmigo. Se me fríe la neurona. Además de todo lo anterior, claro.
Yo soy una persona de lágrima fácil, pero cuando estoy premenstrual parece que en lugar de ojos tengo los deltas del Nilo o del Amazonas, porque soy incapaz de controlarme.
Encima el llanto, no es en plan discreto, no. Ella, Drama Queen. Es una cosa como así:
Otra cosa que me pasa es que no quiero hablar con nadie. Vale, reconozco que no es que sea yo la persona más sociable del mundo, y de normal también me pasa. Pero antes de “esos días”… es algo superlativo. Es algo sin igual. Es que me apetece pegar patadas en la boca a la peña solo porque me digan “hola”.
También me entra un hambre desmesurada. No es que de normal coma yo en abundancia, pero se que me va a venir la regla porque pierdo totalmente el control. Si me pones toda la comida del mundo ME LA COMO.
Y si puede ser todo lo mierdosa y grasosa posible, mejor. Soy peor que un adolesente resacoso.
De la calentura ni hablamos.
Lo mejor es que llega un momento en el que ME DOY CUENTA.
Quicir: si me paso tres días llorando cada vez que se menciona una película infantil o que dos personajes se miran con ternura en Juego de Tronos, o en su defecto si cada vez que alguien me dice “hola qué tal soy el chico de las poesías” yo automáticamente pienso “dios mío que lo maten que no le quiero oír nada más nunca” o que me paso los días con hambre y me comería un jabalí entero yo sola en media hora si me lo pusieras delante o estoy cachonda como una mona O TODO A LA VEZ… Imaginate estar así y encima no poder sacarte la copita.
¿A ti te pasa? ¿Me estoy volviendo loca? ¿a ti también se te fríe la neurona?